Alessandra y el camino encantado

Había una vez una niña llamada Alessandra, que nació con una estrella especial en su espalda. Esa estrella la hacía caminar un poco distinto a los demás, pero también la hacía única. Y es que esa estrella venía a la vida de Alessandra con un propósito: inspirar a otros.

Desde pequeña, soñaba con ser independiente y recorrer el mundo. Cada día se esforzaba por aprender a moverse a su manera. Por supuesto que se cansaba y sentía que el camino no era fácil. Pero Alessandra era dueña de un coraje de quien sabe que aún en la adversidad, hay belleza en la lucha.

Esa belleza la veía reflejada a diario en sus amigos, su familia, e incluso desconocidos que estaban ahí para ayudarla y alentarla.

Alessandra creció y fue cumpliendo sus sueños. Viajó, estudió, profesionalizó sus hobbies y hoy inspira a otros a descubrir que, aunque los caminos sean distintos, todos podemos llegar al destino que deseamos.