El pasado 1 de octubre, el taller culinario Dulce Miel, conformado por jóvenes con discapacidad intelectual, preparó una tallarinata para los asistentes al seminario que impartió la Fundación Distonía. El grupo preparó ravioles con salsa boloñesa que los participantes pudieron degustar durante el evento.
Este taller de gastronomía cuenta con doce miembros, que asisten a clases de lunes a jueves, de 09:00 a 13:00 horas, y se encargó de proveer la alimentación a los asistentes del seminario. Jóvenes de otros talleres colaboraron a la hora de servir el almuerzo.
En la Fundación Distonía ofrecen atención a las personas que sufren este síndrome neurológico que se caracteriza por contracciones musculares involuntarias, las que causan movimientos espasmódicos o posturas anormales.